Estimado presidente Nixon, se avecina una nueva Edad de Hielo
En la década de 1970, algunos pensaban que la Tierra se dirigía hacia una nueva Edad de Hielo. Los geólogos George Kukla y Robley Matthews reflejaron este temor en una carta enviada a Richard Nixon.
Estimado presidente Nixon, se avecina una nueva Edad de Hielo
🧊 Las imágenes no mienten. Desde el espacio, los satélites han registrado la metamorfosis de la Tierra hacia un clima más gélido. El cambio climático está impulsando las capas de hielo más allá de sus márgenes tradicionales en las regiones polares. Ahora comprendemos por qué tantas ciudades despiertan entumecidas tras las persistentes olas de frío. No se trata simplemente de un poco de nieve acumulada en las calles. Es el presagio de una nueva Edad de Hielo, cuyas consecuencias amenazan con quebrar los cimientos de sociedades y ecosistemas de todo el mundo ❄️
🌍 El párrafo que acaban de leer es, obviamente, ficticio. La Tierra, y los habitantes que medramos en ella, no se está congelando, sino todo lo contrario. Sin embargo, hace menos de un siglo, temer un futuro gélido no era una idea descabellada. Cojan algo de abrigo. Vamos a hacer un recorrido histórico para comprender por qué, durante la década de 1970, muchos titulares advirtieron sobre el advenimiento de una glaciación 🤔
📣 Así comienza el artículo que tengo el placer de publicar en Yorokobu. Esta historia nació entre las discusiones académicas del siglo XIX, pero acabó derritiéndose en los pasillos de la Casa Blanca durante la presidencia de Richard Nixon 🗽
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Los bosques de kelp del Pacífico son mucho más antiguos de lo que se pensaba
🌊 El reciente descubrimiento de fósiles de algas sugiere que estos ecosistemas marinos florecieron en la costa de dicho océano hace más de 32 millones de años, mucho antes de la aparición de las nutrias marinas y otras especies que hoy medran entre estas algas. Probablemente estos primeros bosques de kelp fueron la principal fuente de alimento de los desmostilios, unos mamíferos ahora extintos, los cuales tenían el tamaño de un hipopótamo y están relacionado con los elefantes y los manatíes actuales.
🦦 Este hallazgo sugiere que la evolución de los bosques de kelp fue mucho más compleja. Sus primeros habitantes fueron los ya citados desmostilios junto a los plotopteridos, aves marinas no voladoras que podrían hasta medir unos 2 m de largo. Posteriormente, hace unos 14 millones de años, estos ecosistemas estaban poblados por una gran abundancia de bivalvos (almejas, ostras y mejillones), aves y mamíferos entre los que se encuentran sirenios y los Kolponomos, unos animales con forma de oso y predecesores de las nutrias marinas
👉 Pacific kelp forests are far older that we thought (EurekAlert)
Hoy en día, las nutrias marinas contribuyen de forma inequívoca a la expansión y resiliencia de los bosques de kelp 👇
🦦 Durante el siglo XIX, la nutria marina (Enhydra lutris) estuvo cerca de extinguirse debido a la caza por su piel. En California, la única región donde lograron sobrevivir fue la costa central, justo la zona donde en un periodo de unos cien años (de 1910 a 2016) se produjo un aumento significativo de los bosques de kelp. Según un estudio del Acuario de la Bahía de Monterey, las nutrias marinas contribuyeron de forma inequívoca a la expansión y resiliencia de dichos ecosistemas.
🦦 Así lo explica Teri Nicholson, bióloga y autora principal del estudio:
«Demostramos que los bosques de kelp son más extensos y resistentes al cambio climático allí donde las nutrias marinas han vuelto a ocupar la costa de California durante el último siglo. En cambio, los bosques de kelp han disminuido drásticamente allí donde no hay nutrias marinas. De hecho, la densidad de población de nutrias marinas es el factor que mejor predice los cambios en la cobertura del dosel de kelp en este período de cien años.»
👉 Monterey Bay Aquarium study shows sea otters helped prevent widespread California kelp forest declines over the past century (EurekAlert)
Los antequinos, famosos por su actividad sexual mortal, también son caníbales
🐀 Los antequinos oscuros (Antechinus mimetes), unos marsupiales famosos por su actividad sexual mortal, también practican el canibalismo. Durante la época de reproducción, los machos de esta especie luchan frenéticamente, a la vez que se aparean, en combates que pueden durar hasta 14 horas. Tras un período de una a tres semanas, la gran mayoría de los machos acaban muriendo debido al aumento de testosterona y el consiguiente flujo sin control de cortisol.
😮 Ahora Andrew Baker, investigador australiano, ha documentado cómo los antequinos se alimentan de los ejemplares muertos tras dicha actividad. Según Baker, los cadáveres brindan una oportunidad de obtener comida sin coste alguno, tanto para los machos que sobreviven como para las hembras preñadas o lactantes.
👉 Mini marsupial goes from sex fests to cannibal feasts (EurekAlert)
Otras noticias e historias interesantes de la semana pasada 👇
🕸️🦋 Las arañas Argiope atraen a sus presas con una falsa promesa de sexo. Según un estudio realizado en Estados Unidos, algunas especies de Argiope emplean un señuelo que imita las feromonas de apareamiento de los lepidópteros machos del género Hemileuca. Estos insectos se convierten en almuerzo arácnido tras volar hacia las telarañas, debido a que se sienten atraídos por dicho engaño. Sin embargo, algunas especies Hemileuca muestran indiferencia ante el señuelo, indicando una posible historia coevolutiva de artimañas y contramedidas entre depredador y presa. 👉 Fatal Attraction: Argiope Spiders Lure Male Hemileuca Moth Prey with the Promise of Sex (Insects)
🐐 El íbice alpino (Capra ibex) está adoptando un estilo de vida más nocturno debido al calentamiento global. Un reciente estudio de la Universidad de Sassari ha descubierto que dicha especie, la cual es principalmente diurna, ha cambiado su actividad ante el aumento de las temperaturas. En los días más calurosos, los íbices alpinos se muestran más activos durante la noche. Dicho cambio, registrado en dos parques nacionales europeos, se produjo incluso en áreas donde existía el riesgo de ser atacados por depredadores (concretamente lobos) durante las horas de menos luz. Esto sugiere que la necesidad de la especie de escapar del calor supera su impulso de evitar el peligro. Por tanto, adoptar un estilo de vida más nocturno podría exponer a estos herbívoros a una mayor presión de los depredadores, además de reducir su capacidad para encontrar alimento 👉 Global heating pushes mountain goats into more nocturnal lifestyle (The Guardian)
🦜 El periquito ventrinaranja (Neophema chrysogaster) es una especie en peligro crítico de extinción, cuya población salvaje cuenta con tan solo 70 ejemplares. Un estudio, realizado por investigadores de la Universidad James Cook, ha encontrado once virus distintos en ejemplares criados en cautiverio tras analizar el viroma contenido muestras fecales. Seis de dichos virus no habían sido descubiertos antes en esta especie. Se desconoce aún si estos virus son dañinos para los loros, pero el equipo apremia a continuar estudiando el viroma de la especie para comprender mejor el riesgo que representan 👉 Rare Australian parrot faces multi-virus threat (Phys.org)